Wayne Shorter: CELEBRATION VOL. 1. (2024)

Texto: Eduardo De Simone

@eduardodesimone

La discográfica Blue Note, que festeja sus ochenta y cinco años, lanzará este mes Celebration Volume I, un show inédito del último cuarteto del notable e influyente saxofonista y compositor, quien murió en 2023. Shorter trabajó en esas grabaciones hasta sus últimos días, coronando así una trayectoria insoslayable, regada de clásicos álbumes como líder y de temas inolvidables para el segundo gran quinteto de Miles Davis.

Leyendas del jazz quedan pocas, aunque es cierto que el concepto de legendario se va renovando y los grandes actores del género de hace unas décadas serán las vacas sagradas del mañana. Se cuentan con los dedos los gigantes del género que sobreviven en activo (Archie Shepp o Charles Lloyd quien hace poco se presentó en el festival L’Estartit de la Costa Brava) mientras otros ya no pueden tocar por razones de salud, como Sonny Rollins o Keith Jarrett.

El saxofonista y compositor Wayne Shorter era hasta el año pasado uno de los grandes músicos de la era post bop que se erguía disponible para la veneración de los amantes del género. Pero murió en marzo de 2023 a los ochenta y nueve años dejando una estela inconfundible y un cuerpo creativo difícil de igualar.

La noticia que conmueve al mundo del jazz por estas horas es que, como parte de las celebraciones por el 85° aniversario del sello Blue Note, una de las etiquetas emblemáticas para las que grabó Shorter, se lanzará un primer disco póstumo, aunque cabe suponer que habrá más.

Se trata de Celebration Volume 1, un concierto que Shorter grabó en vivo en el Festival de Jazz de Estocolmo en 2014. Lo hizo junto a su último y afiatado cuarteto, que integraron Danilo Pérez en piano, John Patitucci en bajo y Brian Blade en batería.

La edición del álbum es un verdadero acontecimiento, porque aporta un nuevo registro de la última etapa creativa del saxofonista, que lleva a su banda a transitar del reino de la interpretación abstracta a rememorar cierto sonido con el que hechizó a la audiencia en la década de los años sesenta.

Su contribución a la evolución del jazz fue tal que desde que copó la escena norteamericana casi en simultáneo con Coltrane o Sonny Rollins, le añadió combustible a grupos como los Jazz Messengers de Art Blakey y el famoso quinteto de Miles Davis de mediados de la década de los años sesenta. Miles lo persiguió con énfasis hasta que consiguió sumarlo a su escudería en 1964. No se equivocaría: Shorter resultó el motor de un quinteto de estrellas con composiciones propias que dejaron huella como Footprints, ESP, Neffertiti y Prince of Darkness.

Aquel “segundo gran quinteto” de Miles estuvo integrado también por Herbie Hancock en piano, Ron Carter en contrabajo y Tony Williams en batería. Años después de la muerte de Miles los cuatro sobrevivientes, con el liderazgo de Shorter, volverían a reunirse para grabar un disco y ofrecer shows diversos por el mundo con el concurso de Wallace Roney en trompeta.

Hacia el fin de su colaboración con Miles, Shorter ya había expandido los límites del hard bop y la vanguardia del sonido atonal y se había comenzado a familiarizar con elementos de la fusión y el jazz rock. De hecho, el disco Bitches Brew del grupo de Miles fue una suerte de superventas para un registro que podría considerarse como gran inspirador del jazz fusión. También había experimentado una notoria fascinación por el sonido del saxo soprano. Junto con Coltrane y con Steve Lacy fue uno de los músicos que más contribuyó a empujar las posibilidades del instrumento.

En ese contexto no sorprendió que Shorter quedara asociado con el tecladista Joe Zawinul para lanzar un grupo altamente exitoso que dejó varios standards y marcó una época. Fue naturalmente Weather Report, que contó inicialmente con Miroslav Vitous en el bajo, quien le dio paso luego a otra leyenda de muerte prematura: Jaco Pastorius.

Pero volvamos a Blue Note, una discográfica con la que Shorter está fuertemente identificado. Speak no Evil, uno de los discos más valorados por los seguidores del saxofonista, se publicó en ese sello en 1966, año y medio después de su grabación. En la portada aparece su primera mujer, Teruko Nagakami, con quien tuvo una hija, Mikayo, a la cual está dedicado el tema Infant Eyes de ese álbum.

Se trata de un disco especialmente entrañable para los directivos del sello. Se sabe que Blue Note tiene editados más de mil títulos desde que en 1939 fue fundada por los inmigrantes alemanes Alfred Lion y Francis Wolf. Su presidente actual, Don Was, reconoce que Speak no Evil es uno de los discos que más atesora en su corazón.

“No es exagerado decir que me ayudó a superar algunos momentos difíciles en mi vida, comenzando con un período en la década de 1970 cuando abandoné la universidad con la esperanza de unirme a una banda como MC5 o The Stooges”, le dijo Was a la publicación especializada británica Jazzwise.

“Enfrenté mucha resistencia y siempre sentí que Wayne me hablaba a través de su instrumento en ese álbum, dándome orientación, enseñándome a sumergirme y a bucear en la adversidad. Si estaba desorientado, ponía el lado B del LP y me calmaba, me ayudaba a recordar mis sueños y metas y me volvía a encaminar. Me hizo consciente del poder de la música para ayudar a los oyentes a alcanzar la paz mental. Me mostró que crear música era, en efecto, una vocación noble”, se emocionó Was.

La década de 1960 fue un período sagrado para Blue Note porque aquel espíritu del que habla Don Was estaba incorporado en sus grandes innovadores, entre ellos, Eric Dolphy, McCoy Tyner, Tony Williams, Herbie Hancock y ciertamente el propio Shorter.

Pero Blue Note sorprende con este nuevo lanzamiento del show inédito de Shorter en Estocolmo porque no se trata del descubrimiento de un archivo inédito de la década del sesenta sino de una grabación de apenas diez años, lo cual deja en evidencia la riqueza y amplitud del catálogo que atesora la discográfica.

El nuevo disco tiene fecha de lanzamiento el 23 de agosto pero ya se pueden escuchar algunos tracks en las plataformas digitales y acceder a un video en Youtube. Wayne exhibe su lado más cerebral y angular en el tema «Smilin’ Through» y en varias piezas que emplean la composición «Zero Gravity» como leit motiv así como en la inquietante Orbits. En el track «She Moves Through the Fair», de veinte minutos, Shorter lleva al cuarteto al filo de la interpretación abstracta con una búsqueda exploratoria que ofició de contraseña para su última etapa como compositor. En contraste, la balada «Edge of the World» (End Title) es acaso la toma más entrañable del álbum.

Otro dato central de este disco es Patitucci en el manejo del contrabajo, como queriendo dejar atrás aquellos años con la Elektric Band de Chick Corea, cuando se asentó como notorio bajista eléctrico. Su habilidad en el contrabajo queda igualmente en evidencia en este registro que se apresta a lanzar Blue Note.

Cuenta Carolina Shorter, la última mujer del saxofonista, que en el otoño de 2022 el músico y docente Rob Griffin envió a Wayne archivos inéditos para que los ordenara. Ya fuera de los escenarios por problemas de salud, Shorter se dedicó con entusiasmo a revisar esas grabaciones y encontró con alborozo material para más de un disco. Inicialmente imaginó bautizar la colección con el título Unidentified Flying Objects.

Inclusive cuando en enero de 2023 fue hospitalizado, Wayne seguía eligiendo temas y ordenando potenciales discos. Fue en sus últimos días cuando resolvió cambiar el título por Celebration, como una suerte de homenaje a una trayectoria musical de la que afortunadamente aún tenemos registros por descubrir.

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