Introducción: Redacción
Texto: José Bolívar
Fotos: Txus García
El pasado día 12 de mayo puso punto y final la XXVI edición del Alhambra Jazz Festival de Vic, el festival que se lleva a cabo en la capital de Osona y que se posiciona como una de las principales citas jazzísticas nacionales, con propuestas novedosas provenientes del ámbito europeo, estatal y local. Para saber más acerca de este evento, José Bolívar y Txus Garía visitan el Jazz Cava de Vic para hablar con dos de los artífices de este certamen, Eva Freixa Agustí, vicepresidenta del festival, y Cai Godayol, miembro de la junta del mismo:
Un amigo murió hace unos meses. Me queda de él su fascinación por la Cataluña más profunda, su firme respeto por la diversidad, su amor por la buena música y su capacidad para no juzgar. Cuando le conté que me venía a trabajar a ésta zona, él, que vivió muchos años aquí mismo, me recomendó tres cosas: callejear muy atento por la historia de Vic, conocer los viejos volcanes de La Garrocha y buscar un par de amigos suyos que siguen por acá, y que “tenían más historias que Vic y más años que los volcanes”.
Empecé por la primera: Vic. Me vine algún día, caminé, pregunté, escuché, caminé un poco más, escuché mejor, y llegué a La Jazz Cava de la capital de la comarca de Osona. Para mí, un gran descubrimiento; un lugar cargado de magia e historia que ofrece un ambiente íntimo, cálido, diverso y acogedor. A nivel musical, propuestas nuevas y arriesgadas, lenguajes musicales contemporáneos, atento cuidado en la programación y una calidad sonora que con su acústica envuelve y abraza. Por otra parte, una distribución del espacio que facilita la integración y un público diverso en cuanto a culturas, edades, género y nacionalidades de origen. Un espacio maravilloso. Y claro, quienes vivimos en la zona, donde no abunda la oferta nocturna, lo agradecemos. Y allí me enteré del Alhambra Festival Jazz Vic. Y, desde allí también, y colaborando con Más Jazz y su propósito de visibilizar el género y sus alcances, decidimos conocer un poco más sobre la organización del evento, sus aspectos más relevantes y su propuesta de ésta, la edición XXVI que se llevó a cabo entre el 2 y el 12 de mayo de 2024:
El festival contó con dieciocho actuaciones distribuidas en el escenario Momentos Alhambra, en la Biblioteca Pilarín Bayés y en la Iglesia de Los dolores y, dos sesiones de DJ en La Jazz Cava, es la propuesta del presente año. Al hablar con el equipo de personas que organiza el evento, como punto de partida, el cartel: Pianíssim: Freedom First. Keith Lamar & Albert Marquès; Horse Orchestra; Tom Chant I Joni Sigil Homenatge a Marianne Brull; Xavi Torres Trio, “Quarantena Songs”; Underpool Live Recording: Cesar Joaniquet Quartet; Dj Miguelito Superstar; Combos Emvic; Kimchi; Jeppe Zeeberg And The Absolute Pinnacle Of Human Achievement; Florian Stoffner, John Butcher & Chris Corsano; Kit Downes Organ Solo; Ray Of Light; Ragnarök Trio; Curos; Enemy; Big Band Emvic; Young Barcelona Jazz Quintet; y, para finalizar, una Jam Session.
En la conversación también nos contaron de cómo empezó todo: en 1993 un grupo de personas, amantes del jazz, programaron diferentes jam session en El Casino de Vic; el interés fue creciendo en cuanto a público, músicas y músicos locales, nacionales e internacionales; se conformaron como asociación cultural; después, ante la necesidad de un espacio propio, se ubicaron en la mítica cava de piedra situada al final de la muralla histórica. Y así, a fuerza del empeño y constancia construyeron su propio festival.
Hoy, el Alhambra Festival Jazz Vic se mantiene con vigor. Ofrece un cartel que, además de propuestas innovadoras y novedosas que hacen que la escena mantenga plena vigencia, ha contado también con la participación de artistas de Gambia y Marruecos. Y lo apuntamos porque en la zona existen migraciones que cada día hacen mayor presencia en la región, por lo que cada ejercicio que favorezca la inclusión y la convivencia se suma a los esfuerzos que desde las políticas antirracistas se vienen adelantando. No todo se soluciona con la música, pero sin ella es imposible lograr cambios sociales. La que siempre nos une, la que siempre nos convoca, la que siempre nos abre puertas a mejores escenarios de interacción. Y es que, además, si hablamos de jazz, es inevitable recordar que la UNESCO busca sensibilizar al público general sobre las virtudes del género como herramienta educativa y motor para la paz, la unidad, el diálogo y la cooperación entre pueblos.
La semana en la que murió mi amigo decidí salir a caminar por Vic. Aún desconozco mucho de lo que aquí pasa, he ido poco a los volcanes, he hablado sólo con uno de sus viejos amigos, pero lo que dije al inicio: me queda de él su fascinación por la Cataluña más profunda, donde estoy; su firme respeto por la diversidad, lucha de la cual me siento aliado; su amor por la buena música, eso siempre, y por eso celebramos este festival.
Por José Bolívar
