Si miramos a la escena española actual del jazz, debemos reconocer que existe, quizás como nunca antes, una importante generación de músicos jóvenes formados tanto en escuelas españolas como internacionales que seguramente marcarán una época.
Texto y fotos: Daniel Gluckmann
La cita de hoy es en el barrio de Malasaña de Madrid, en “Música Creativa”, una de esas escuelas en cuya lista de profesores destacan muchos miembros de esa generación como es el caso de Daniel Juárez, saxofonista nacido en Talavera de la Reina, quien con sólo 32 años ya arrastra más de 10 años de carrera y 4 álbumes publicados, sin contar el que lanza este mes de febrero.
“Yo creo que en España, con músicos entre los 30 y los 40 años, se ha generado una buena escena que tiene en común la pasión, no sólo por el jazz, sino por aunar todos los estilos que han sido influencias para nosotros como el R&B, la música electrónica, o la mezcla de la frescura del jazz contemporáneo con la música folclórica. Siempre me encuentro gente que tiene ese gusto en común conmigo”, destaca Juárez en el aula 7 del “laberinto” que es el edificio de la escuela, instalada en el centro de la ciudad.
El nuevo trabajo de Daniel Juárez se llama “Reflexividad” y lo grabó junto a un fantástico grupo de músicos como son Moisés P. Sánchez al piano, Pablo Martín Caminero al contrabajo y Naima Acuña a la batería. Estará disponible en todos los formatos desde el 21 de febrero. En vinilo y CD a través de la web Bandcamp.com, en la tienda Jazz y Más, en la Sala Despertar. En digital, lo podrás encontrar en todas las plataformas. El plato fuerte, la presentación en vivo, será el 12 y 13 de Mayo en el Café Central de Madrid y en el Jimmy Glass de Valencia, el 29 de Mayo.
MasJazz: ¿Como entró la música en tu vida?
Daniel Juárez: De pequeño, mi padre me ponía muchísimos vinilos. Recuerdo estar jugando con los muñecos en el patio de casa oyendo los solos de George Benson. Es un aprendizaje maravilloso aprender escuchando de una forma casi inconsciente.
MasJazz: ¿Desde el principio fue el saxo tu instrumento preferido?
Daniel Juárez: Antes, de los 8 a los 10 años, estuve tocando la batería un par de años, que también fue potente porque una de las cosas en las que menos nos fijamos los saxofonistas a la hora de empezar a tocar es el ritmo. Y aunque tocaba cosas muy básicas, pasodobles y música de mi tierra, todo eso se te va quedando. Mi padre, que es un gran amante de la música latina y del latín jazz me ponía mucho a Paquito de Rivera, a Chucho Valdés, a Irakere. Y todo ese ritmo se te va quedando, se te va impregnando.
MasJazz: ¿Y cómo apareció el saxo?
Daniel Juárez: Mi padre fue percusionista en una orquesta de baile durante siete años y también tocaba la guitarra pero un día se regaló un saxo alto y empezó a tocar aunque no llegó a hacer mucho. La cosa es que yo veía que había un estuche ahí y a escondidas lo abría. El nácar blanco de las teclas me alucinaba. Luego cuando a los 10 años me ofrecieron estudiar un instrumento en la Escuela Municipal de Talavera me dieron a elegir entre la trompeta y el saxo. Yo ya tenía el saxo, lo había estado “manoseando” un poco así que fue fácil decidir.
Además, tuve mucha suerte porque en la escuela había un profesor llamado Oscar Iris, muy amante del jazz y ya desde pequeñito me introdujo en una mini big band que se llamaba “Jóvenes Jazzeros”. Es súper importante tocar en grupo desde el principio.
Después de varios años en la escuela, Daniel Juárez apostó por dedicarse de lleno a la música y tuvo su siguiente dilema: jazz o clásica. El sonido de la infancia pudo más y se fue a Madrid a estudiar jazz con el maestro y saxofonista Bobby Martínez (“Cuéntame tu historia, me decía, y yo no lo entendía. Pero visto hoy en día, ¡qué importante fue eso que me dijo!”), con el pianista argentino Germán Kucich y con el también saxofonista Bob Sands hasta que decidió cursar los 4 años de carrera en Musikene, el Conservatorio Superior de Música del País Vasco.
Daniel Juárez: Los años del conservatorio los aproveché muchísimo. Gracias a profesores como Miguel Andueza, Miguel Blanco, Joaquín Chacón, Mariano Díaz o Guillermo Manguil conseguí asentar toda esa información inconsciente que yo venía tocando y comprender de verdad los montones de solos que había sacado estudiando con Bobby. Durante la carrera, a veces tocaba con alguno de ellos nada menos que en el Café Central. Eso era una pasada!
MasJazz: Y después, a donde si no que a Nueva York, no?
Daniel Juárez: Sí, pensé que era el sitio por el que tenía que pasar sí o sí. Para esta música, Nueva York es una meca. A nivel artístico es un sitio súper potente. Luego, a nivel de vivir allí ya es otra cosa, te tiene que gustar y para mí, que era muy jovencito, fue un poco duro ya que no me gustan los sitios tan caóticos así que estuve en total unos 6 meses me vine de vuelta. Ya vi lo que era y me di cuenta de que también podía seguir madurando en un sitio más pequeño.
MasJazz: Pero sí que te cundió ya que hasta te dio para grabar un disco…
Daniel Juárez: Sí, que eso no es poco. Tuve mucha suerte y pude grabar mi segundo disco “Neuronal Odd World” con otros músicos que también que estaban entre estudiando y viviendo allí, como Samvel Sarkisyan o la magnífica cantante Alina Engibaryan, que eran más duros que yo (ríe) y se quedaron. Incluso llegamos a tocar el disco en un club de Harlem que se llama Silvana. Fue muy especial.
El músico define a Nueva York como una “marabunta” en la que no paran de ocurrir cosas. Lo describe como un lugar muy exigente en el que hay que tener una mentalidad muy fuerte para absorber y aprovechar todas las situaciones que se presentan. Todos los días ocurrían cosas nuevas, se encontraba con todo tipo de músicos (algunos que más tarde se consagraron, como Immanuel Wilkins), resultando a la vez denso e inspirador. Los jóvenes compartían piso y con Juárez vivían la cantante Lara Vizuete, Dani Pozo y Ernesto Larcher, estos últimos, profesores de la Escuela Creativa como él. Todo giraba alrededor de aprovechar la experiencia a tope.
Sin embargo esa no sería la última aventura internacional de Daniel Juárez quien luego pasó otra temporada en el Prince Cloud Conservatory de Gröningen (Países Bajos) para redondear una formación muy intensa que despertó también su propia vena educativa, que ahora es otra parte muy importante de su actividad.
MasJazz: ¿Porque volviste a España?
Daniel Juárez: En España y en Europa, hay gente que también tiene un tremendo talento, empezando por los músicos que me acompañan en este nuevo disco, y con la que compartir la música también es muy interesante. No solo los americanos tienen ese conocimiento.
MasJazz: Todos tus discos son composiciones tuyas, no?
Daniel Juárez: Si, que yo recuerde solo he grabado una obra que no es mía. Es una versión de una jota tradicional de Talavera que originalmente se llama “Viva Talavera Viva” aunque yo la llamé simplemente “Jota de Talavera” en homenaje a mi ciudad. Pero sí, empecé a componer muy joven, en el año 2007 y he sido bastante prolífico.
Para grabar estándares o temas clásicos de jazz, tienes que hacerlo con mucho tacto y respeto. Yo no he encontrado aún una fórmula para “contarlos” desde mi propio estilo. Podría tocar todos los solos de Sonny Stitt, quien influyó mucho en mí estilo, pero para eso ya estaba él. La versión original es difícilmente superable.
MasJazz: ¿Cómo ha evolucionado tu música desde “Caminos” (2014), tu primer álbum hasta “Reflexividad” que lanzas ahora?
Daniel Juárez: En realidad hay mucha similitud entre Caminos y Reflexividad y no solo por el detalle del título en castellano. La similitud, está sobre todo en lo orgánico, en lo acústico. Caminos es un disco acústico con un par de toquecitos de algún teclado, y Reflexividad también. El corazón me tira a componer de una forma más poética, más sencilla y luego darle una forma más compleja a la hora de tocarlo en directo. Se asemeja mucho al concepto poético que puedes leer en un haiku (un estilo japonés de poesías breves) que es sencillo pero profundo. Luego, su forma definitiva surge de las aportaciones de los demás músicos que le dan mucha dirección y mucho poder.
MasJazz: ¿Porque “Reflexividad”?
Daniel Juárez: Este disco, al final, es un compendio de reflexiones. Por eso lo he llamado “Reflexividad”. Ya los títulos de los temas dan pie a que la gente los lea y vea en lo que yo pensaba cuando lo compuse, algo que también esa persona ha pensado alguna vez. “La belleza de lo diferente”, por ejemplo. Todo el mundo ha pensado en eso y me gustaría que alguien pueda escuchar ese tema y que pueda extrapolarlo a su propia vida.
MasJazz: ¿Los títulos te salen después de la música o antes?
Daniel Juárez: Muchas veces, a la vez. Esto, ahora, me está sonando a lo que estaba reflexionando esta mañana o ayer y que siempre apunto en una libretita de reflexiones que tengo. En el caso de “Oesed” (Deseo al revés), es un juego de palabras basado en una fábula de la escritora J.W. Rowling que habla de un espejo que te muestra lo que quieres ver, tus sueños, tus deseos. Pensaba en el deseo como concepto y también en más formas. Desear a alguien cuando estás en una relación o tener el sueño de pasar tiempo con ese alguien.
MasJazz: ¿Cómo ha sido el proceso creativo con Moisés, Pablo y Naima para este trabajo?
Daniel Juárez: Yo ya tenía casi toda la música compuesta y un día se me ocurrió organizar una sesión con ellos, con quienes llevo tocando hace tiempo en otros proyectos, a los que admiro mucho y con los que me une una amistad. En ese contexto, no tenemos que hablar para saber lo que queremos tocar y donde queremos ir.
Y ya en esa primera sesión vi que sonaba solo, sin hacer malabarismos, y que podíamos darle una dirección muy natural y orgánica, que es al final lo que yo busco. Así que programamos dos o tres sesiones más y lo grabamos. ¡Me encantó que todos estuvieran tan entregados!
Por mi parte, siempre busco tener muy claro lo que estoy haciendo para poder estar pendiente de lo que hacen los demás y que lo que hagan funcione como un complemento y te ayude a avanzar y a construir cosas. Al final, es como estar sobre una nube que te lleva.
La grabación la hicimos con la productora PK de Petros Klampanis con quien ya grabé mi disco anterior. Petros lo hace muy bien, es una discográfica humilde, pero te ayuda mucho y le gusta la música de gente joven, europea que está saliendo e intentando hacer cosas que se salgan de lo comercial.
MasJazz: ¿Si pudieras pedir un deseo para grabar con un músico internacional que admiras, con quien sería?
Daniel Juárez: Actualmente ese sería Ambrose Akinmusire. A nivel de concepto musical y compositivo es muy top y está metido en una película en la que muy poca gente está metida sobre todo a nivel jazz contemporáneo. Tiene un sello muy definido y personal. Cuando saqué mi primer disco, “Caminos”, una amiga en común se lo enseñó y le dijo que le había gustado mucho. Eso para mí fue como, ostras, qué guay, ¿no? Luego, solo me lo crucé alguna vez en la Manhattan School. Desde luego, él estaría el primero en mi “wishlist”.
MasJazz: Ya con una carrera musical, varios discos grabados, ¿qué te aporta ser también educador?
Daniel Juárez: Más que una cuestión de estabilidad económica, que también lo es, compartir lo que yo pueda saber me aporta mucho. Este año empecé a dar clases de composición a alumnos de cuarto y está siendo un reto porque se sale de las asignaturas prácticas y te tienes que enfocar al acto en sí de crear. Al principio estaba muy fastidiado porque me preguntaba si realmente tenía algo que ofrecerles, pero al final le acabas pillando el gusto y descubriendo la manera de contar algo que le interese a la gente y les ayude en su objetivo de convertirse en profesionales, que es lo que la gran mayoría pretende. Por suerte, en este mundo del jazz no te están poniendo zancadillas constantemente.
MasJazz: ¿Y como es ese camino para llegar a convertirse en profesional?
Daniel Juárez: Es complicado. Ya lo es para artistas bastante consagrados a los que les cuesta conseguir la continuidad que necesitan pero es como todo, vas subiendo escalones poco a poco aunque no todo depende enteramente de uno mismo ya que aunque tú continúes creando, mejorando como músico y buscando tus conciertos, también depende de la valoración de los que tienen la potestad de decir, venga, cuento contigo en mi festival o en mi club. Al final es una mezcla entre el nivel al que llegues artísticamente y el recorrido de años que lleves. En las escuelas se debería dedicar más tiempo a este tema, sobre todo a como afrontar las situaciones que te esperan como profesional porque muchas veces te van a decir que no y eso hay que saber gestionarlo.
MasJazz: ¿Qué perspectivas te abre tu nuevo disco?
Daniel Juárez: Este disco aporta mi trabajo más maduro, más condensado o enfocado. Me gustaría poder tocarlo en festivales y en sitios amplios, como centros culturales o teatros. Todavía estoy pendiente de la confirmación para la presentación que espero sea en primavera.
Os mantendremos informados pero si antes de verlos en vivo quieres “verlos” interpretar algún tema del álbum en tu pantalla, los encontrarás en este enlace: