Texto: Adrián Besada
Fotos: José Luis Luna
Jazz Eñe es un auténtico escaparate para los artistas y grupos que cada año son seleccionados para participar en este de cara al mercado internacional. El saxofonista Roberto Nieva lidera uno de los proyectos que ha podido subirse al escenario del Teatro Victoria Eugenia este 2024, un músico que, tras su paso por la residencia Focusyear (Basilea, Suiza), ha recalado con fuerza en las programaciones de clubes y festivales estatales. Actualmente se encuentra presentando su segundo y último trabajo, Empirical Sound, en el que recoge en clave de jazz sus vivencias de los últimos dos años, que lo han inspirado y transformado personal y musicalmente.
Para saber un poco más acerca de él, Nieva atiende a Más Jazz Magazine un día después de su presentación en el ciclo promovido por Fundación SGAE.
Te has presentado a Jazz Eñe con el proyecto Roberto Nieva 4tet, ¿piensas en este como un grupo o son tus composiciones adaptadas a este formato?
Roberto Nieva: Habitualmente, cuando tú estás presentando un proyecto que tiene composiciones propias, suele llevar el nombre del líder de la banda, del compositor. Otra cosa es que sea un proyecto colaborativo, en el cual todo el mundo escribe música y demás. Ahora mismo estoy presentando mi música, es el segundo disco que grabo y es como mi identidad musical.
Entiendo, lo que eres como músico y tu forma de entender y vivir la música…
Roberto Nieva: Claro, la carta de presentación de un músico es su música, lo que propones en ella tanto a nivel compositivo como a nivel interpretativo.
¿Tenías en mente los músicos con los que ibas a tocar?
Roberto Nieva: Sí, desde un principio. Desde que decidí grabar sabía quién quería que estuviera.
Entonces, ¿escribías directamente pensando en un músico?
Roberto Nieva: No directamente. Tampoco es que sea un ensemble en el cual puedes atender a ciertas particularidades. Escribo mi música y en ella los músicos que están conmigo tienen su libertad para aportar, no es algo hermético, intento que los músicos, sea quien sea que toque conmigo, puedan ser ellos mismos al interpretar mi música.
Este último año te he visto en los carteles de muchos festivales y ahora estás en Jazz Eñe ¿a qué crees que se debe ese empujón?
Roberto Nieva: Sí, Jazz Eñe es un empujón y hace que un proyecto como es un disco tenga más proyección y desarrollo. Sí que fue un poco a raíz de este que comencé a tener más conciertos, quizá no tenga nada que ver, pero esta fue la primera fecha que cerré con este proyecto. Está claro que tocar en el marco del Festival de Jazz de San Sebastián, ver tu nombre en la programación, da mucha visibilidad.
Durante tu concierto hablaste varias veces para explicar las canciones y dijiste algo sobre una línea conceptual que atraviesa este disco, ¿cuál dirías que es esta?
Roberto Nieva: Principalmente, este disco ha sido un compendio de experiencias, personas, etc. durante los dos últimos años, que comprenden mi estancia en la residencia artística de Focusyear. Lo que he querido transmitir un poco ha sido esa experiencia e intenté plasmarla en algo atemporal, que es la música. He querido escribir en base a eso, al desarrollo personal y al desarrollo a nivel compositivo e interpretativo que he podido tener a lo largo de ese tiempo.
Háblanos un poco de eso, de tu trayectoria, tus experiencias, etc. durante estos años.
Roberto Nieva: Realmente una de las cosas que más ha influido en mi carrera ha sido esta residencia en Basilea. He tenido la oportunidad de compartir semanas, conciertos y ensayos con gente con la que no me hubiese imaginado, era algo impensable: Chris Cheek, Sullivan Fortner, Tineke Postma, Wolfgang Muthspiel, Kris Davis, Jorge Rossy, Cuong Vu, Ingrid Laubrock, Miguel Zenón, Elena Pinderhuges o Guillermo Klein. Evidentemente estos son nutrientes para mí, fue increíble.
Tu eres de Castilla, ¿cómo ves el panorama por allí?
Roberto Nieva: Yo realmente vivo en Madrid, salí de Ávila hace mucho tiempo. Aun así, creo que Castilla es un territorio virgen, no hay tradición, espacios, ciclos, etc. Es una comunidad muy grande pero no tiene recorrido ni trayectoria. Si los responsables a nivel político y cultural no se interesan por estas cuestiones va a ser imposible que la situación cambie.
¿Tienes más actividad como músico además de tu proyecto?
Roberto Nieva: Sí, claro, como músico freelance tienes que tratar un poco de moverte por diferentes escenas y proyectos para sobrevivir. Además me dedico a la docencia. Hay que estar un poco a todo.
¿En qué términos hablarías de tu propia música?
Roberto Nieva: Ciertamente es difícil. No podría definir mi música en pocas palabras porque es algo muy profundo, algo con lo que llevo mucho tiempo trabajando. También es una manera muy genérica de hablar, porque este disco trata de las últimas experiencias que he tenido, por ejemplo, pero mi música va a cambiar mucho dependiendo de lo que me inspire, del momento vital, existencial, etc. Es un poco una pescadilla que se muerde la cola. Aun así, las influencias que haya podido tener están ahí, claro. Soy de Ávila, mi papá es músico de música tradicional y eso seguro que me ha influido, también mis gustos personales, la gente de la que me rodeo en cada momento, como Román Filiú.
¿Y de tu sonido?
Roberto Nieva: Es algo que trato de trabajar todos los días. Seguramente los saxofonistas que escucho todos los días están presentes también en mi música. También trabajo mucho la composición, me interesan mucho los compositores del siglo XX.
¿Cuál crees que son las tendencias jazzísticas en boga?
Roberto Nieva: Bueno, puedes echar un ojo a las programaciones de clubes y festivales, creo que son un buen termómetro de lo que ocurre.
¿Tú eres músico de club o festival?
Roberto Nieva: De las dos cosas, no puedes autolimitarte. Todo el mundo quiere tocar en clubes, pero al final también buscas estar en los festivales. Creo que es una rueda que se retroalimenta, hace una especie de bola de nieve. Ayer estuve increíblemente cómodo aquí, depende un poco del lugar y de cómo te traten, independientemente de que sea un sitio u otro.
Ya para terminar, ¿qué te depara el futuro con este proyecto, este último disco?
Roberto Nieva: Tenemos como tres ventanas de conciertos. La primera la terminamos en Talavera. La segunda en noviembre, que estará comprendida entre los días 1, 2 y 3 entre Ávila, Valencia y Vitoria. Por último, en el primer trimestre de 2025 vamos al norte de España. Luego, es posible que el próximo verano vayamos a Brasil, pero aún queda desarrollo.