Texto y entrevista telefónica: Adrián Besada Diego
Después de liderar el proyecto Mecha, que le valió el premio a mejor disco de jazz de Chile en el 2017 con Atar y desatar, Daniel Román saca a la luz su nuevo proyecto, Labio, bajo la firma de Daniel Román Rodríguez Jazz Quartet. El guitarrista chileno mantiene vivo el concepto que subyace a Atar y desatar y sigue apostando por el uso de la música tradicional y folclore chileno para formular un jazz poco ortodoxo que emana frescura y saber hacer. A diferencia del primer proyecto, Labio ofrece una sonoridad más jazzística, donde la composición es permeable al carácter y musicalidad de los músicos con los que trabaja, con amplios espacios para la improvisación y el diálogo.
Sin una narrativa definida, Román pone sobre la mesa su universo musical, un recorrido ecléctico que atraviesa el jazz tradicional y contemporáneo, la música experimental, el folclore chileno y la poesía. La idea que subyace al disco es su propia evolución y madurez como compositor e intérprete, que deja claro el compromiso con sus raíces al tiempo que descontextualiza las mismas, introduciendo una vertiente en la escena del jazz nacional que resulta, cuanto menos, fascinante. Para profundizar y entender mejor todo lo que rodea Labio hablamos con el propio Daniel Román:
¿Háblanos un poco de este nuevo disco, qué nos vamos a encontrar en él?
Empezar diciendo que el disco fue grabado en los Estudios Matilda con Rodrigo Díaz y mezclado por Nicolás Ríos. Los músicos que lo hicieron posible fueron Alain Ladrón de Guevara a la batería, Cesar Filiú al saxo y Fernando Lamadrid al bajo. El proceso fue curioso, porque grabamos el disco a trío, en vivo, con guitarra, saxo y batería, y Fernando añadió las líneas de bajo posteriormente, así como algunos arreglos de guitarra. Es la primera vez que construyo un disco de este modo, fue algo curioso, pero es una forma de controlar muchos aspectos de la composición y el sonido sin perder la esencia de tocar en vivo
¿Cómo fue el trabajo a nivel compositivo?
Algunos temas vienen de proyectos anteriores, ideas que no estaban del todo definidas y terminé de darle forma aquí. Otros temas son composiciones que parten de la tradición chilena, de buscar un nuevo significado y sonoridad en la música tradicional. Otros temas, como “Labio” (que da nombre al disco) los compuse aquí en España parte del interés por recuperar la sonoridad de la guitarra traspuesta, una guitarra con una afinación distinta.
Así mismo, entiendo la composición como una propuesta, no un espacio cerrado. Aunque compongo la estructura, las melodías y algunos arreglos, soy de los que piensan que el bajista va a tener mejores ideas que yo sobre la línea de bajo, el saxofonista sobre las de saxofón, etc. Es decir, creo que la capacidad de los músicos para crear es algo que hay que aprovechar a la hora de tocar y grabar, es la forma de completar el puzzle.
¿Este proyecto tiene algo que ver con tu anterior proyecto en Chile, Mecha?
Realmente trato elementos similares, elementos que parten de la música tradicional, como te dije. Sin embargo, en este disco creo que es mucho menos perceptible por los músicos que participan. En este disco hay temas como “El vencejo”, que lleva un guitarrón loopeado y poesía, en el que estos elementos no son casi perceptibles, se descontextualiza el sonido y uso de estos, por decirlo de alguna manera. Entonces, lo que puedo decirte al respecto de esto es que aplico la misma formula y la voy profundizando, en vez de cambiar radicalmente los elementos que participan en mi música.
El sonido de este disco, a diferencia del otro, está mucho más arraigado en lo jazzístico que en lo tradicional, esto se debe en gran parte a los músicos de los que te hablé. Alain y Cesar tienen su propia concepción de la interpretación y del jazz, así como Fernando, que tiene una forma muy particular de tocar, con mucho groove. En este sentido no quise ponerle atajos a ninguno, me gusta que sean ellos los que terminan por definir la sonoridad final.
¿Por qué eliges este formato, el cuarteto, para dar forma a tu música?
Tenía en mente un proyecto a trío, con guitarra, bajo y batería, pero después de tocar con Filiú decidí que tenía que estar en el disco, no solamente como por ser un excelente saxofonista, sino también porque tiene una mirada sobre la música muy parecida a la mía, además su perspectiva sobre la música tradicional y las incursiones en el jazz son muy interesantes. Por otro lado, el formato de cuarteto da al disco una cierta continuidad también con el anterior disco de Mecha, Atar y desatar (2017)
¿Hay algún concepto detrás del disco o entiendes cada composición como una entidad cerrada?
Creo que casi sin querer hay una cierta coherencia, en parte por los elementos de la música tradicional y la idea que subyace a toda mi música respecto a la música de Chile, la instrumentación, la poesía, entre otras cosas. Entonces esto une, en cierto modo todo lo que hago e hice, sin embargo, no hay una idea como tal de unidad entre todas las partes del álbum, de hecho, muchas composiciones son muy distantes entre sí en el tiempo.
En este disco lo que sí tenía claro era que estaba decidido a cantar, que es algo que no había hecho en ningún trabajo de estudio anterior. En este disco tenía urgencia entre la voz, el poema, la incursión de la palabra en la música. El canto a lo poeta exige un discurso melódico y una estructura para el texto, aquí pretendí llevarlo a un ámbito más libre, a la deconstrucción de estos elementos tradicionales dentro del contexto del jazz.
¿Habrá una versión física del disco?
Es algo de lo que no estoy seguro, a veces me pregunto quién tiene hoy en día aparatos para reproducir CD’s y ya no digamos vinilos. Me gustaría hacer algo la verdad, aquí debo mencionar a la chica que hizo el arte del disco, mi amiga Mariana Muñoz, de Chile.
Volviendo a tu pregunta, decirte que es una cuestión complicada, por su puesto hace ilusión tener el producto, el disco, pero muchas veces no compensa económicamente si no haces un tiraje grande y es una apuesta arriesgada. Es algo de lo que no estoy muy seguro, pero entiendo y sé que es una herramienta importante de promoción.
¿Tienes algún concierto próximo?
Ahora mismo tengo varios conciertos a la vista, pero en cuanto al disco, la idea es conseguir salir de Madrid e intentar ir a por todas. Estoy muy agradecido por tener esto hecho, poder escuchar el disco y ahora tener la oportunidad de estar tocando con Naima Acuña, con Filiú, Lamadrid. Para mi esto es un logro muy grande ya. Sea como sea, ahora voy a intentar moverlo por festivales, sé que es algo complicado, pero es como el siguiente paso para seguir evolucionando y creciendo.
¿Te gustaría añadir algo más?
Bueno, como te decía, que estoy muy agradecido a ta la gente que participó en esto, con los que tengo la oportunidad de tocar y compartir, tanto Filiú como Naima o Mario Carrillo, se han involucrado en el proyecto y han sido tremendamente solidarios, siempre los he sentido como un apoyo para seguir haciendo esto.
Podréis disfrutar de la presentación en directo del álbum Labio de Daniel Román Rodríguez Jazz Quartet el domingo 20 de noviembre en el Café El Despertar y el siguiente miércoles 23 en el Club Matador (solo para socios/as del Club)