Por Ezequiel Paz
Fotos cortesía de Womad
Mulatu Astake ha conformado una carrera carrera extraordinariamente rica que le ha aclamado como el padre del ethio-jazz.
Desde sus estudios musicales en el Trinity College London y Berklee College of Music, a través de grabaciones innovadoras del legendario el sello Amha en la época dorada de Addis Abeba, pasando por giras africanas con el mismísimo Duke Ellington en los ´70, hasta su contribución a la película Flores Rotas de Jim Jarmush (2005) y la grabación de un disco con la Banda The Helliocentrics y los australianos Black Jesus Experience, todo en Astake presenta una peculiaridad musical primigenia.
Además, para sorpresa de casi todos, su adopción por parte de la juventud musical de Europa y Estados Unidos, y su muestreo por la realeza del hip hop (Kanye West, Knana o Damian Marley), lo ha catapultado recientemente a la escena más puntera del mainstream norteamericano.
Al Womad las Palmas 2023 nos trajo, tanto algunos planos secuencia musicales de sus incursiones en las bandas sonoras jarmuchianas como pasajes de su álbum, Sketches of Etiopía. Todo su corpus compositivo nos recuerda la grandeza de los arreglos de Gil Evans o los poemas sinfónicos tardíos de Ellington. Su obra en su conjunto homenajea los ritmos y danzas de las tierras del Cuerno de África cuya amalgama de culturas aún sirven de motor a su música. Multiinstrumentista de pro, Astake, que iba para ingeniero pero un día la música le cortó el paso, decidió desde el principio centrarse en el vibráfono, e introducirlo en el circuito de las bandas afro-jazz que derivarían con el correr de los años en el subgénero llamado Ethio-jazz.
Para su aterrizaje en el festival grancanario multiétnico Womad, Astake, reunió a un equipo de primer nivel de la generación dorada de jóvenes del Reino Unido, entre los que destacó el trompetista londinense Byron Wallen. La duración marcial de los conciertos Womad (60 minutos) debida a una bipolaridad nacida de sus dos escenarios alternantes, permitió a Astake construir su discurso en base al disco “Sketches of Ethiopía” y en su diversidad sonora pudieron adivinarse ecos de Sketches of Spain de Miles Davis, así como ritmos de factura febril como el “gamo”, el jazz-funk o los más tradicionales del norte de Etiopía.
En el Ethio-jazz de Astake conviven la rítmica ancestral más arcaica con las formas musicales más experimentales. Todos estos elementos se alinean para dibujar un retrato musical de Etiopía que se corporeiza en los siguientes instrumentos: el laúd de arco de una sola cuerda, el antiguo krar, una lira de seis cuerdas y el washint, una suerte de flauta de bambú.
Mulatu Astake se convirtió así en polo de atracción de la segunda jornada del Womad Las Palmas 2023 que, a la vera del Auditorio Alfredo Krauss y con el beso suave pero constante de la marea atlántica puso de nuevo a la Macaronesia en el mapa del jazz étnico mundial.